Dado que los casos de COVID-19 están aumentando en muchas partes del mundo, ahora parece ser un buen momento para revisar las diferentes formas de tratar una infección por COVID-19.
Las opciones dependen de qué tan enferma esté la persona. Para esta publicación, vamos a hablar sobre los tratamientos para adultos, disponibles en EE.UU., cubriendo los casos de personas con síntomas leves hasta el correspondiente a personas con enfermedad grave.
GRUPO 1: Adultos con COVID-19 con bajo riesgo de progresión a una enfermedad grave, que no requieren hospitalización ni oxígeno suplementario
➡ Tratamiento sintomático. Esto puede incluir cualquier cantidad de cosas para reducir los síntomas y, en general, ayudarlo a sentirse mejor, desde la sopa de pollo de la abuela hasta medicamentos de venta libre para reducir la fiebre, la tos, la secreción nasal, los dolores o molestias.
➡ Es importante vigilar y alertar a su médico y/o acudir al departamento de emergencias si los síntomas empeoran.
GRUPO 2: Adultos con COVID-19 con alto riesgo de progresión a una enfermedad grave, que no requieren hospitalización ni oxígeno suplementario
➡ Tratamiento de los síntomas como en el grupo 1
➡ Nirmatrelvir reforzado con ritonavir (Paxlovid): esta es la opción de tratamiento preferida para la mayoría de las personas. Paxlovid es una píldora antiviral que reduce el riesgo de hospitalización en aproximadamente un 89%. Debe iniciarse dentro de los 5 días de aparición del primer síntoma. Paxlovid tiene muchas interacciones con otros medicamentos, por lo que es importante hablar con su médico antes de comenzar a tomar este medicamento.
➡ Remdesivir: este es un medicamento antiviral que se administra por vía intravenosa durante 3 días. Reduce el riesgo de hospitalización en aproximadamente un 87%. Debe iniciarse dentro de los 7 días posteriores a la aparición de los síntomas.
➡ Si alguien no puede obtener Paxlovid o Remdesivir, la siguiente mejor opción es bebtelovimab. Este es un tratamiento con anticuerpos monoclonales que se dirige a la proteína espiga del SARS-CoV-2. Debe administrarse dentro de los primeros siete días de la infección. Los tratamientos con anticuerpos monoclonales utilizados anteriormente (como sotrovimab) no son tan efectivos contra la sub variante Ómicron BA.2, ¡pero bebtelovimab sí lo es!
Por último es el medicamento molnupiravir. Molnupiravir debe administrarse dentro de los primeros 5 días de aparición de los síntomas. Tiene solo un 30% de efectividad para reducir el riesgo de hospitalización o muerte. También existen ciertos riesgos en personas embarazadas y preocupaciones de que podría ayudar a producir virus resistentes a los antivirales.
➡ En los EE.UU., puede encontrar lugares que tienen tratamientos para el COVID-19 dando clic aquí
GRUPO 3: Adultos con COVID-19 que requieren hospitalización y oxígeno suplementario
➡ Tratamiento sintomático. Tener COVID se siente horrible.
➡ Administrar remdesivir si solo se necesita un poco de oxígeno adicional. Remdesivir reduce el riesgo de intubación.
➡ Si se necesita algo más que un poquito de oxígeno, el tratamiento es dexametasona y remdesivir. La dexametasona es un medicamento esteroide que reduce la inflamación. Una gran cantidad de estudios han demostrado que la dexametasona reduce el riesgo de muerte para las personas que están hospitalizadas y necesitan oxígeno suplementario.
➡ Si las personas empeoran rápidamente y necesitan más oxígeno en un período corto de tiempo, se agrega un segundo medicamento inmunomodulador (como baricitinib o tocilizumab). Estos son medicamentos que reducen la inflamación y reducen la respuesta inmunitaria hiperactiva.
GRUPO 4: Adultos con COVID-19 que requieren hospitalización y ventilación mecánica o ECMO
➡ Estas personas están muy enfermas y requieren atención en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI).
➡ Pueden ser tratados con ventilación mecánica (tubos colocados en la garganta para ayudarlos a respirar) o incluso oxigenación por membrana extracorpórea (ECMO). ECMO se usa cuando tanto el corazón como los pulmones están dañados y necesitan tiempo para sanar. La sangre se bombea fuera del cuerpo a una máquina de circulación extracorpórea para eliminar el dióxido de carbono y agregar oxígeno. Luego se vuelve a calentar y se devuelve al cuerpo.
➡ En estos casos, la dexametasona es la piedra angular del tratamiento.
Por supuesto, el mejor tratamiento es aquel que nunca se necesita. ¡Por eso la prevención es lo más importante! ¡Las vacunas, el aire fresco, quedarse en casa cuando está enfermo, las pruebas y el uso de mascarillas en interiores cuando las comunidades reportan más casos activos siguen siendo medidas importantes!
Como siempre, esto no es un consejo médico. Si se enferma, llame a su médico para hablar sobre qué tratamiento podría ser mejor para usted.
Cuerpo sano, mente sana.
Las Nerdy Girls
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